Hernandez Olivera Pedro · El Leon y el Raton

El leon y El raton

Cuento Infantiles maria pascual

Era la hora de más calor del día. Un león grande y maresigoso se encontraba tumbado a la sombra de un árbol. Estaba cansado de tanto rugir y demostrar que era el rey de la selva. Se había gustado ahí para echar una siesta cita.

Apenas había cerrado los ojos cuando un ratón muy pequeño se le acercó. Empezó a subirse por la cola y después caminaba entre sus patas. Más tarde se paseo por el lomo de la fiera y empezó a dar vueltas alrededor de sus orejas. El león apenas podía dormir y estaba perdiendo la paciencia. Pero como el ratón era tan pequeñito, no quería asustarlo.

El león intentó dormirse, pero el ratón volvía a colgarse de sus vigotes. Hasta que al final, harto del pequeño animal, el león lo agarró de un serpazo. ¡No me matis, no me matis por favor! Critaba el ratón si tomó y asustado. Pero tú no sabes que yo soy el rey de la selva y no sabes también que no debes molestarme.

Grunió el león. Sí, lo sé, pero quería jugar. Dijo el ratón.

Precisamente por eso no me has dejado dormir. Le reprocho enfadado el león. Mira, rey de la selva. Si me perdonas, yo te ayudaré en lo que pueda.

Le dijo muy decidido el ratoncito. El león se puso a reír por la promesa del pequeño animalillo. Tanta gracia le hizo que soltó el ratón. Anda, vete y déjame dormir de una vez. Dijo cariñoso. Para que no lo molestaran más, el león se alejó un poco de allí. Pero tan adormilado iba, que no había una trampa oculta entre los árboles.

Una enorme red cayó sobre él. Cuando se dio cuenta, ya estaba metido en ella.

Intentó escapar, pero ya no podía, estaba atrapado. Comenzó a rugir muy fuerte, tanto que por toda la selva rezonó su lamento.

El ratoncillo que no andaba lejos, oyó a aquellos rugidos y reconoció que era los de su amigo el león. Sin perder tiempo, corrió hasta allá y comenzó a roer las cuerdas de la red. Poco a poco hizo un agujero lo bastante grande para que el león pudiera escapar. De esa manera, ayudó el pequeño raton al majestuoso y grande león. Si eres bueno y a los demás ayudas tendrás siempre a mis tades seguras.